¡Hola, amantes de las fotos y del amor! Hoy quiero compartir con vosotros una experiencia que nunca olvidaré: la sesión de Postboda con Javier y Lucía en Sariñena, la Cartuja de la Virgen de las Fuentes y el desierto de los Monegros. Fue una auténtica locura, diversión, riesgo y paisajes alucinantes.
Javier y Lucía son una pareja maravillosa que confió plenamente en mí para su boda y postboda. Desde el primer momento, conectamos a la perfección, y cuando me propusieron hacer la sesión de Postboda, me retaron a explorar lugares fuera de lo común y a crear fotos que reflejaran su espíritu atrevido y apasionado. Así comenzó nuestra increíble aventura por Sariñena y sus alrededores.
Comenzamos en la impresionante Cartuja de la Virgen de las Fuentes. Con sus majestuosos muros de piedra y su ambiente sereno, era el escenario ideal para capturar la elegancia y la calma de Javier y Laura.
¡Pero eso no fue todo! Decidimos llevar las cosas al siguiente nivel y aventurarnos en el desierto de los Monegros. ¡Sí, suena a locura total! Pero Javier y Laura confiaron en mí al cien por cien y nos lanzamos a esta experiencia única en medio tozales y un paisaje poco habitual en fotografía de boda.
Nuestra sesión de Postboda no solo fue divertida y arriesgada, sino que también fue una muestra del gran nivel de confianza que Javier y Laura depositaron en mí. Me siento profundamente honrado de haber sido elegido por esta pareja tan guapa por dentro y por fuera y de haber tenido la oportunidad de capturar su amor en lugares tan especiales. Esta experiencia me recordó que la fotografía no solo es tomar fotos, sino también construir conexiones con las personas que confían en mí para contar sus historias.
Quiero sinceramente agradecer a Javier y Laura por permitirme ser parte de su aventura y por confiar en mí para crear recuerdos que durarán toda la vida. Fue un privilegio poder capturar su espontaneidad, su amor y su carácter en cada foto.
Y a todos vosotros, espero que esta historia y las fotos les transmitan una pequeña parte de la magia y la diversión que vivimos en nuestra sesión de Postboda.
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