Hoy toca nueva historia de boda, la historia de Samuel y Regina, una pareja simpática, alegre, culta y, sobre todo, de verdad.
Antes de la boda ya, cuando nos reunimos en el estudio, pude notar que les envolvía un Aura muy especial y posteriormente, cuando ya los fui conociendo más profundamente, puedo decir que lo comprobé en persona. Samuel y Regina son de esas parejas que te tocan el alma y sin darte cuenta, se hacen un huequecito en tu corazón dejando huella para siempre.
Samuel y Regina, siendo como son, su boda no podría haber sido más bonita y eso que la celebraron en medio de unas estrictas medidas “anti Covid” que les impidió celebrar su boda como ellos la habían soñado. De hecho, justo después de la cena, en el momento en que más y mejor lo estaban pasando, tuvieron que dar por acabado el banquete ya que no se podía bailar en las bodas, no hacer ningún tipo de fiesta con música, bailando todo el mundo.
Tengo que decir también que su acogida y su trato durante toda la boda, tanto por su parte, como por la parte de su familia e invitados, fue de 10. Nos hicieron sentir uno más de la celebración, sentí en todo momento, como si estuviese fotografiando la boda de unos amigos, sentimiento que se ha hecho realidad a día de hoy.
La ceremonia la celebraron en la Iglesia de San Miguel de los Navarros, en pleno centro de Zaragoza, ya que no querían que sus invitados tuviesen que ir de un lado a otro, con distancias muy largas. Por eso y por que es precioso, también el hotel que eligieron para el banquete fue el NH Gran Hotel de Zaragoza, también en el centro, en el que tanto su salón, como la sala de cóctel son una auténtica maravilla.
Sin más, os dejo con el reportaje de la boda de esta maravilla de pareja.
Justo aquí debajo de estas leras podréis encontrar el Slideshow de su boda con una mayor selección de fotos y en el que os podéis haceros una mejor idea de lo que fue su boda.
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